jueves, 26 de abril de 2012

2ª ETAPA: POLONIA


Nuestra segunda reunión de trabajo tuvo lugar en Polonia, entre finales del mes de enero y principios del mes de febrero. En esta ocasión, también, aprovechando días que teníamos libres en el instituto, ya que la hicimos coincidir con la celebración de Santo Tomás de Aquino. En esta ocasión solamente viajamos profesoras, no nos acompañó ningún alumno o alumna, ya que las temperaturas eran realmente gélidas y consideramos que podía ser un serio problema. Ese era nuestro temor antes de viajar pero, una vez allí, nos dimos cuenta que el frío era mucho mayor de lo que originariamente habíamos sospechado, ya que nuestra visita coincidió con una ola de frío siberiano. A pesar del frío, la visita fue realmente interesante y productiva.

Si hay algo que podríamos destacar especialmente en esta segunda reunión ha sido la buena organización, así como la calurosa acogida y hospitalidad por parte de nuestros socios polacos. La cantidad y variedad de actividades organizadas para nosotr@s fue increíble.

El inicio y final del viaje tuvo lugar en la ciudad de Cracovia, ya que era el aeropuerto más cercano para poder desplazarnos a Gorzyce. Cracovia fue la antigua capital de Polonia, ésto se puede percibir en sus edificios, monumentos palacios, catedrales, etc., conformando un rico patrimonio artístico y cultural. Su casco viejo fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, en él predominan las construcciones de estilos gótico, barroco y renacentista. En esta ciudad también visitamos el ghetto judío y la fábrica de Oskar Schindler, el industrial que consiguió salvar la vida de unos 1200 judíos del holocausto nazi, ocupándolos en su fábrica. Es un lugar muy interesante para conocer la historia polaca, incluyendo la ocupación nazi y el holocausto.

Otra visita, que nos marcó enormemente, fue a los campos de concentración y exterminio de Auschwitz-Bikernau. No se sabe con certeza cuántos prisioneros fueron exterminados en ambos campos, pero se piensa que entre 1,1 y 1,6 millones, de los cuales, la mayoría eran judíos. En el recorrido pudimos intuir las condiciones de vida en las que vivieron esas personas. Digo intuir, porque saber con certeza cómo vivieron y sobrevivieron algunos, es realmente difícil. El frío, por dentro y por fuera, fue helador.

De Cracovia, nos desplazamos hacia Gorzyce, lugar donde se encuentra el instituto de nuestro socio polaco. Allí fuimos llegando todos los socios europeos, nos recibieron con bebidas calientes, snacks, refrescos y demás… Una vez que estuvimos todos juntos empezó el programa de actividades, por ellos organizadas. Dentro de estas actividades incluyeron un taller de papiroflexia, donde nos mostraron este arte, una presentación, muy resumida, de la historia de Polonia desde sus orígenes hasta la actualidad. Nos realizaron una visita por el centro educativo, mostrándonos las distintas instalaciones del mismo, en esta visita pudimos constatar que había una gran cantidad de carteles y posters donde dejaban claro que formaban parte de nuestro Proyecto Europeo y la importancia de ahorrar energía, como contribución al cuidado del medio ambiente. Realizaron un desfile con las banderas e himnos de cada país socio; un desfile de ropa y complementos realizados totalmente con materiales reciclados; diferentes bailes y danzas… Mientras los profesores trabajábamos en el Proyecto, los alumnos polacos enseñaron a los alumnos de otros países que habían asistido a la visita, a bailar la polonesa, danza tradicional polaca y luego nos mostraron el resultado, muy bueno, por cierto.

Como ya hemos comentado, con anterioridad, estuvimos revisando el Proyecto, las actividades realizadas hasta la fecha, la consecución de objetivos, establecimos el calendario de las nuevas actividades a llevar a cabo, etc.

A pesar del frío, nos invitaron a un paseo en coche de caballos por los campos polacos helados, el frío era impresionante, ya que estábamos a muchísimos grados bajo cero. Sin embargo la experiencia fue muy interesante y diferente, a nuestro regreso nos esperaba una gran hoguera en el exterior y una sopa muy caliente y contundente en el interior. Además de un concierto de un grupo punky.

También nos llevaron a visitar una fábrica donde se hacen bolas navideñas de cristal, que se exportan a todo el mundo, especialmente a Italia y Estados Unidos. Se nos explicó y mostró su proceso de fabricación, nos permitieron decorar nuestras propias bolas y nos regalaron un par de ellas a cada visitante, además de una más para cada centro educativo allí representado.

Nuestra estancia en tierras polacas iba tocando a su fin, pero todavía quedaban más actividades para nosotr@s. El penúltimo día nos llevaron a visitar una mina de sal en Wielicka, a unos kilómetros de Cracovia. Pudimos caminar por diferentes galerías, abiertas a los turistas, el guía nos explicó cómo se explotó esta mina durante siglos y nos mostraron diferentes estaturas realizadas por mineros que trabajaban en dichas minas. Después de esta visita, asistimos a una conferencia sobre medio ambiente y reciclado en la  Facultad de Ciencias de la Universidad de Cracovia, fue muy interesante y entretenida. De aquí nos llevaron a un restaurante de comida tradicional polaca para cenar, una vez finalizada la cena, nos dirigimos  hacia el hotel, cercano al aeropuerto, desde donde partiríamos, todos los países socios, el día siguiente a distintos horarios.

Nos encantaron las experiencias vividas en este país y estamos esperando, con impaciencia, la siguiente visita de trabajo a Eslovenia, en el mes de mayo. Esta vez, sí nos acompañaran estudiantes.